Es de suma importancia sobre todo durante el primer año de vida de nuestro hijo, protegerle de los alérgenos. Las fundas antiácaros son imprescindibles, de hecho sería aconsejable su uso durante toda la vida.
Está demostrado que existe una predisposición genética a los padecimientos alérgicos, se cree que casi el 50% de la población mundial sufre de algún tipo de alergia y un 20% de dichas alergias se relaciona con las telas.
Las fundas anti-ácaros reducen la exposición a los alérgenos ya que establecen una barrera entre el colchón y la persona; las fundas anti-ácaros no se usan simplemente para proteger el colchón de la humedad o el polvo cuando el colchón se encuentra en desuso, sino también son situadas debajo de la sábana principal, para que la persona pueda descansar sin problema alguno, protegiéndonos de estos bichitos invisibles, que se alimentan de nuestras células muertas.
Los tejidos de las fundas para colchón de esta naturaleza poseen tejidos provistos de una fina membrana transpirable que brinda un máximo confort, los mismos son de microfibra y polialgodón, hipoalergénicos y suaves; además el diseño de la membrana hace que los tejidos sean completamente impermeables.
La funda para colchón antiácaros de Bubba Blue posee una textura mucho más suave de lo habitual, este producto está especialmente recomendado para los niños debido a que hasta los 5 años poseen piel sensible y el roce con materiales rústicos puede afectarla o provocar un inicio de alergia.
Puedes encontrarlas en nuestras tiendas Australian Kids de San Sebastián de los Reyes ó Retiro en Madrid. Y próximamente en nuestra web.
1 comentario:
Madre mía que bien explicadito lo dejas, no dirán que es por falta de información. Genial, si es que eres un hachaaaaaaaaaaaaaaa................vales pa tó.........un besazo y que tengas un lindo día.
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