
Me gustaría recordaros a todos que hoy es un día especial, un gran día.
Se celebra el día del niño y aunque la celebración más internacionalizada es el 20 de noviembre, que conmemora el día Universal de la Infancia y el XVII aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño (aprobada en 1989), hoy en España y en algunos paises de Iberoamérica se celebra el Día del Niño como una forma de reivindicar los derechos de la infancia: educación, fraternidad y respeto.
La verdad es que me encanta que se creen estos días dedicados a todos los colectivos que merecen una atención especial, porque tristemente no pueden gozar de los mismos derechos en todas las partes del mundo.
En la web de UNICEF, en su apartado dedicado a la infancia, se relatan datos escalofriantes de lo que "nuestros niños" sufren a diario (digo nuestros niños porque todos somos un poquito responsables):
- Un 20% de los niños en nuestro mundo viven en la pobreza más extrema.
- Uno de cada 12 niños muere antes de cumplir los 12 años.
- Más de 100 millones de niños no están escolarizados.
- Más de 300.000 niños son utilizados como soldados y casi 2.000.000 son explotados sexualmente.
Parece mentira que en pleno siglo XXI sigamos así.
Uno de los primeros en conmemorar este día ha sido el buscador google, que ha cambiado su logotipo por la imagen de un niño despertándose de la cama, lavándose los dientes y desayunando y colgándose su mochila para ir al colegio.
Todos deberíamos recordar todos los días lo que tenemos y educar a nuestros hijos para que sepan lo que tienen y lo valoren y que el día de mañana sean unos adultos responsables. Seguro que de este modo construiremos una sociedad más justa.
Esto es lo que todos necesitamos... y que los niños (uno de los colectivos más desfavorecidos, porque dependen de los adultos para sobrevivir) dejen de sufrir.
Me gustaría transcribir una frase célebre de Paulo Coelho, "un niño siempre puede enseñar tres cosas a un adulto: a ponerse contento sin motivo, a estar siempre ocupado con algo y a saber exigir con todas sus fuerzas aquéllo que desea".
Aprendamos de ellos...
El ser más importante no es el padre, ni la madre, sin duda alguna es el niño porque de él depende el futuro de la sociedad.